En estos días he recibido una noticia preocupante sobre la salud de alguien muy importante y cercano para mí. Todos los que amamos a esta persona no queremos que sufra y deseamos con todo nuestro corazón que se cure y siga a nuestro lado muchos años. Ella nos ha cuidado siempre con todo su amor, no ha escatimado nunca esfuerzos, sacrificios, ánimos, lucha, ilusión, buen carácter...me quedo corta.
Afortunadamente el proceso para salir de esta situación está en marcha. Sólo hace falta seguir en manos de Dios (antes que nada), confiar en los médicos y , por supuesto, no decaer ni perder el ánimo y la fuerza para seguir adelante.
FÉ en Dios, ESPERANZA en la curación y MUCHO AMOR entre nosotros (su familia) y hacia ella.